El día en el que De Gea cumplió 20 años, Casillas hizo su mejor actuación en lo que va de temporada. El Atlético es el equipo que hasta el momento más ha exigido al meta madridista, que respondió con firmeza en todas sus acciones. Sacó una gran mano a Domínguez en un córner, voló ante un disparo de Reyes y solventó un par de acciones del Kun Agüero. Echó el candado cuando fue necesario y ahorró problemas a su equipo.
Al rojiblanco, por primera vez, se le vio algo nervioso. Lo estuvo en un disparo de Di María que no atrapó y que Khedira, en fuera de juego, remachó a la red. No valió la jugada, pero sí subió minutos después el tanto de Özil, en el que meta tuvo su cuota de responsabilidad. No colocó bien la barrera y el balón entró por su palo. El de Illescas se redimió en alguna ocasión posterior. Le sacó un mano a mano a Higuaín e hizo una gran parada a Marcelo en el tramo final del partido.
Tendrá que esperar De Gea para conquistar el Santiago Bernabéu, donde manda Casillas. Avisó Quique Sánchez Flores en la previa de que era el mejor del mundo y lo comprobó el Atlético. Cuando llegan los partidos importantes, rara vez falla. Tampoco suele hacerlo De Gea, que ya ha brillado en otros grandes estadios. Chamartín, sin embargo, es otra historia, en especial para el Atlético.
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